Blog turismo 06.06.2017 5 rasgos del auténtico viajero Seguro que tú también tienes a un amigo así. Una persona incapaz de permanecer más de tres meses seguidos en el mismo sitio, siempre hambriento de experiencias nuevas y de querer conocer lugares escondidos. Y, aunque quizás, tu amigo o amiga no tiene mucha estabilidad en su vida, no puedes evitar envidiarle un poquito. Además de “conocer mundo”, viajar logra modificarte el carácter. Los viajeros tienen siempre un aire casi magnético que nos invita a estar siempre con ellos escuchando qué es lo que tienen que decir. Desde Ostelea proponemos 5 aspectos que definen el carácter del viajero a la perfección. 1. Menos superficiales La única manera de curar la ambición salvaje y el materialismo es viajando. En parte, porque es muy difícil que el viajero tenga posesiones materiales. Ni casa, ni coche ni grandes lujos. Su presupuesto se invierte, directamente, en costear su día a día. 2. Abiertos de mente Viajar es aprender. Salir de tu zona de confort para entrar en un destino completamente distinto al tuyo, ser capaz de interactuar con otras personas con culturas completamente diferentes o, simplemente, descubrir otras formas de entender la vida… Viajar es el ejercicio más efectivo para aprender. 3. Románticos por naturaleza No hay nada más romántico que un rincón íntimo en el que conocerse. El que viaja con frecuencia, tiene un don especial para identificar aquellos lugares más recónditos de la ciudad. 4. La curiosidad por bandera ¿Cuántas veces has dejado de hacer algo por vergüenza? Por algún extraño motivo, cuando viajas, esa vergüenza se desvanece y eres capaz de preguntar, curiosear y aprender sin ningún tipo de reparo. El viajero es un ser curioso por naturaleza. 5. Personas mucho más profundas Aunque sólo sea por desconocimiento del idioma, cuando se viaja a un país con una lengua que no es la tuya, estás obligado a escuchar. Conocer el interior de las personas que te rodean proporciona mayor profundidad y contraste de la realidad. Viajar es una de las experiencias vitales más edificantes. Por eso, siempre que se pueda, es recomendable realizar un viaje que ayude a salir de la zona de confort, conocer gente nueva y aprender de un entorno maravilloso. Compartir