Blog turismo 02.08.2019 Cómo viajar solo y sentirse acompañado Cómo viajar solo y sentirse acompañado Todos los dichos populares acaban adaptándose a cada nicho, así que a todos aquellos que os consideréis viajeros empedernidos, os guieis por un instinto wanderlust, o simplemente queráis vivir una experiencia nueva, tomad nota: “Es mejor viajar solo, que mal acompañado.” Los viajeros solitarios o solo travellers no son personas extrañas, ni con estilos de vida o ideologías fuera de lo normal. Simplemente escogen una forma de viajar menos común. Los que ya se hayan aventurado a hacerlo, os podrán confirmar que sus únicos compañeros de viaje son las personas desconocidas con las que se cruzan aleatoriamente en un lugar y tiempo determinados, sin ningún tipo de organización. Producto del destino, sus caminos se entrelazan e interfieren el uno al otro con mayor o menor impacto, sin importar nada más que sus propias decisiones. Cada decisión te lleva por un camino distinto Allá donde vayas, viajar en solitario te invita a conocer gente maravillosa dispuesta a compartir sus conocimientos y experiencias en forma de recomendaciones, direcciones, historias o todo aquello de lo que puedas mostrarte interesado. A raíz de ello, decidirás el siguiente paso a seguir y te abrirás camino a una experiencia casi a medida. Así es la vida, un viaje donde cada instante es una decisión, y cada decisión lleva a un camino o destino distinto. Es por eso que viajar solo es vivir una experiencia única e irrepetible ya que serás tú el que la configure al 100%, adaptándola a tus valores, posibilidades y necesidades según el momento que pases en tu vida, Además, puedes hacerlo en cualquier tipo de destino. Destinos ‘Solo Traveller’ Los destinos más frecuentados por los solo travellers o grupos reducidos son los paraísos naturales y culturales como Costa Rica o Bali. Incluso puedes escoger hacer la ruta por todo lo alto y movilizarte en trenes de lujo o a la aventura, durmiendo en hostales locales on-the-go y compartir habitación. Escápate del grupo organizado Al viajar en grupo solemos adoptar una actitud dependiente a la de nuestro grupo de amigos, pareja o familia para plantear un viaje y naturalmente buscamos coincidir en fechas, gustos o recursos comunes hasta tal punto que incluso a veces terminamos por formar parte de un viaje organizado que simplemente no va con nosotros.. ¿Alguna vez has pensado en hacer todas aquellas propuestas que se te ocurrieron pero que nadie más quiso apostar por ellas? Viajar solo es la oportunidad única de recopilar todos tus planes o ideas fallidas y realizarlas una a una, sin orden preestablecido ni nada que te influya. Suena un poco egoísta, pero lo mejor es que tampoco vas a fastidiar a nadie, simplemente te reservas unos días para tí, para embarcarte en una experiencia de la que aprenderás más de lo que crees. Viajar solo, un viaje a tu interior Viajar solo es realizar un viaje a tu interior en el que te enfrentarás a momentos de todo tipo, (de soledad, plenitud, libertad, duda, miedo, ilusión, decepción, logro y fracaso) sin contar con la seguridad o confianza que te proporcionan tus habituales compañeros de viaje o incluso la disponibilidad y asistencia de una agencia de viajes, Solamente estás tú en el programa, todo lo demás está en tus manos. Es una experiencia que te permite conocer gente, salir de tu zona de confort, y sobretodo, conocerte mejor a tí mismo. Si nunca te lo habías planteado, es tan sencillo como cerrar los ojos y dar rienda suelta a la imaginación. A partir de allí, según las posibilidades y formas de hacer de cada uno, solo queda priorizarse a uno mismo. Compartir