Blog turismo 29.08.2017 El turismo en USA decrece desde la elección de Trump Los números no mienten. Y en esta ocasión, dicen lo siguiente: desde que Donald Trump fue nombrado Presidente de los Estados Unidos, el país atrae menos turistas. Su infame travel ban es una de las culpables de este declive turístico. Sólo 8 días después de la propuesta, el pasado 27 de enero, los vuelos internacionales con destino a Norteamérica bajaron un 6.5% respecto al año pasado, según informan desde la compañía de travel data Forward Keys. El estado que más ha sufrido con estas medidas ha sido California, en particular las ciudades de Los Angeles y San Diego. Las búsquedas online para comprar vuelos hacia América también bajaron un 17% esa misma semana. La bajada fue especialmente dañina en los vuelos provenientes de los países árabes: como informaba Sir Tim Clark, presidente de Emirates Airlines, los vuelos desde Dubai bajaron un 33% desde el anuncio de la travel ban. Las pérdidas debidas a este descenso de la actividad turística se estiman de unos 185 millones de dólares desde el 28 de enero hasta el 4 de febrero. Las previsiones apuntan a una pérdida de 4.3 millones de visitantes durante 2017. No sólo va a sufrir el sector hotelero y el de las aerolíneas: los retailers también prevén una temporada dura. Si ya se estaban enfrontando al auge del e-commerce, la supervivencia se les va a complicar aún más sin la habitual afluencia de turistas que suele comprar en sus tiendas físicas. No es la primera vez que los americanos ven comprometida su situación turística. Entre 2000 y 2006, hubo bajadas anuales del 3%. Estas se debían principalmente al miedo provocado por los atentados del 11-S de 2001, y por las mayores medidas de seguridad y visado tomadas en ese período. La situación de la industria turística americana ha obligado a algunos representantes del sector a comunicarse directamente con el Presidente. Roger Dow, CEO de la US Travel Association, escribió una carta abierta a Donald Trump. En ella, pedía a Trump que “dijera al mundo que aunque estuvieran cerrando sus puertas al terror, debían mantenerlas abiertas al negocio”. El principal lobby americano del turismo pidió al Presidente, que mantiene relación con algunos magnates hoteleros, que dejara clara la postura receptiva de los americanos frente al turismo extranjero. Sin embargo, no todo son malas noticias para el turismo norteamericano. La ciudad de Nueva York ha visto como sus reservas subían un 198% respecto al año pasado. La mayoría de estos viajes son realizados por personas con un alto nivel adquisitivo, y se ven poco afectados por la situación política puntual del país. La tendencia de las aerolíneas ha sido rebajar los precios a pesar del gasto constante en publicidad y marketing, así que estas modalidades de viaje de lujo han demostrado ser una de las pocas opciones rentables para las compañías. Compartir