Blog turismo 14.07.2016 ¡Madrid estrenará un autocine este verano! Tengo una espina de la adolescencia clavada, no lo puedo evitar. Siempre me hubiera gustado ir a uno de esos autocines que salían por televisión. Yo y mi chica en un Cadillac descapotable aparcado justo en frente de una pantalla gigante. Las palomitas de bolsa, un vaso de refresco de litro y el romanticismo de una noche de verano se encargan de contrarrestar los patéticos efectos de una película de serie B. Simplemente, fantástico. Sé que como yo, muchos hemos soñado con un plan de verano como ese. Pero, ¿por qué nunca se hizo popular en nuestro país? Lo hemos visto en las películas americanas, en las series de televisión de nuestra infancia y en los dibujos animados y, sin embargo, jamás han llegado a instaurarse en España. Aunque ahora, todo está empezando a cambiar. En Estados Unidos, el primer autocine se abrió en Texas en 1921. Pronto se popularizó llegando a ser un auténtico fenómeno durante los 60. En España, en cambio, el primer autocine fue en 1959 pero no consiguió arraigar y cerró al cabo de unos meses. Un autocine con capacidad para 350 coches A finales de este verano y gracias a la iniciativa de 4 jóvenes emprendedores, Madrid abrirá su propio autocine que estará ubicado en el barrio de Chamartín. El espacio, con 25.000 metros cuadrados, podrá albergar hasta 350 coches aparcados. Aunque éste no es el primer autocine de España, ni tampoco el único (se calcula que, actualmente, hay 8 autocines en activo) si será el autocine más actualizado y moderno. Por ejemplo, el sistema de sonido. Contará con una radio de frecuencia propia a través de la cual, los cinéfilos podrán escuchar la película evitando ruidos y sonidos molestos. La pantalla, por su parte, tendrá 250 metros cuadrados por lo que se podrá disfrutar de la película aún y estar aparcado a una larga distancia. Si duda, un plan espectacular para el ocio madrileño durante el verano. Además de proyectar clásicos cinematográficos también contará con una zona especial para aperitivos y golosinas. En concreto, el parking de foodtrucks en los que los clientes del autocine puedan acompañar la película con un perrito caliente, taco o hamburguesa…¡El último grito gastronómico! Compartir