Blog turismo 18.07.2017 7 peligrosas maravillas naturales No hay duda: nos atrae lo que no se nos recomienda. Si los viajeros ya somos curiosos por naturaleza, basta con que nos digan que algo puede resultar peligroso para que lo deseemos con todas nuestras fuerzas. Los parajes que hoy os traemos tienen una belleza salvaje que cautiva: armaos de precaución y disfrutad de la siguiente lista. 1. La piscina del Diablo (Zambia): un baño nada relajante En las africanas Cataratas Victoria se encuentra esta piscina natural, conocida como la Piscina del Diablo. Perforada en la roca, esta situada en el mismo abismo de las cataratas. Cuando el nivel del agua es bajo, los valientes bañistas pueden apoyar los pies en la roca para evitar ser arrastrados por el río: ¿tentarías a la suerte? 2. Roca Kjerag (Noruega): En los mismísimos fiordos noruegos cuelga esta roca entre dos paredes verticales. Si nos atrevemos a mirar abajo, veremos 1000 metros de altura hasta el fiordo de Lyse. Conseguir la foto definitiva para nuestro Instagram puede parecer tremendamente tentador, pero se trata de un desafío al vértigo sin igual. 3. La Roca Preikestolen (Noruega): a 604 metros y sin barandillas Sin movernos del fiordo de Lyse, podemos seguir quedándonos sin aliento si decidimos visitar la Roca Preikestolen. Conocido como el Púlpito, este saliente en la roca es una plataforma sin valla alguna que nos proteja de una caída mortal. La falta de seguridad y el fuerte viento que sopla ahí arriba nos exigen la máxima precaución, aunque es frecuente ver a gente sentada al borde, con los pies colgando sobre el fiordo. 4. Blue Hole (Belize): un agujero en el océano Lo que habían sido cavernas durante la era del Hielo es ahora un agujero azul de cuevas submarinas que llegan a los 123 metros de profundidad. Considerado la Meca de los buceadores, resulta muy peligroso si no andamos con la máxima precaución: sólo para llegar a la entrada del agujero debemos descender 34 metros. ¡Y a ti te duelen los oídos al llegar al fondo de tu piscina! 5. Hua-Shan: más de 100 muertes al año Para llegar a la cumbre de esta montaña china se deben superar algunos de los tramos más arriesgados que conoce el hombre. Es mortalmente celebre el conocido como Changong Zhandao. Esta pasarela de madera, de apenas 30 centímetros, recorre una pared totalmente vertical. Unas cadenas fijadas a la roca serán nuestros únicos aliados en esta empresa, que se verá recompensada con unas vistas sin igual. 6. Desierto de Danakil: 55ºC en Etiopía En estas fechas, es habitual oír quejas en la calle sobre la temperatura a la que llegamos al mediodía. ¿Qué tal suenan 55ºC en medio de Etiopia? Uno de los punto más calientes de la tierra, es el hogar del volcán de Dallol. La concentración de azufre, sulfuro y sal en la roca dan un color anaranjado al paisaje que realza la sensación de calor en la zona.: parece como si el terreno mismo estuviera ardiendo bajo nuestros pies. 7. Cráter de Darvaza: el horno de la Tierra En el desierto de Karakum, en Turkmenistán, existe esta cueva repleta de gas natural. Según cuentan en National Geographic, un grupo de geólogos soviéticos descubrió este paraje en 1971. Tras intentar perforar la zona para encontrar petróleo, se dieron cuenta que el cráter que estaban abriendo no contenía nada, y decidieron desistir y quemar los gases contaminantes antes de abandonar la zona. Esa misma llama es la que sigue quemando tras más de 40 años en la conocida como Puerta del Infierno. Compartir