Blog turismo 02.04.2020 Implementar la tecnología en turismo Los avances tecnológicos han incidido y transformado la manera en de producir, consumir y comunicar en la sociedad, de forma que todas las organizaciones deben adecuarse a este contexto si quieren mantener o mejorar sus ventajas competitivas en el mercado. El sector turístico es considerado uno de los más relevantes en esta transformación digital, dado que se trata de una actividad que se orienta claramente al cliente, situándolo en el centro de las estrategias de negocio. Por ello, algunas de las tecnologías que ofrecerán mayores oportunidades a dicho sector son la Inteligencia Artificial, el Big Data, el Internet de las Cosas, la robótica o el blockchain. De todo ello se habla en el Informe sobre la transformación digital en el sector turístico elaborado por el Laboratori d’Innovació i Intel·ligència Turística (LABIIT), del Departament d’Innovació Turística del Centre Tecnològic Eurecat, con el soporte del Patronat de Turisme de la Diputació de Tarragona, así como el estudio de casos prácticos. Percepción versus realidad Partiendo del hecho que afirma que la transformación digital no tiene freno y que ésta se ha de entender como un cambio global e integral del sistema turístico, las organizaciones han de cambiar y evolucionar, ya que se prevé que en los próximos años la realidad sea muy diferente a cómo la conocemos hoy en día. Si bien es cierto que el turismo se considera uno de los sectores con una mayor oportunidad y capacidad para liderar dicha transformación digital, tal y como dice un estudio de la consultora IDC sobre que el 65% de las empresas españolas ya ha impulsado un proceso de estas características, la percepción del grado de digitalización de una organización tiende a no corresponder con la realidad. Así pasa con los establecimientos hoteleros en España. Según recoge un estudio elaborado por el Instituto Tecnológico Hotelero (ITH) en 2018, “pese a que el 73% de los hoteles considera que sus niveles de adecuación son elevados o muy elevados, en realidad solo un 36% presentan los niveles a los que aluden”. Implementación integral del cambio digital El primer paso dentro del proceso del cambio digital consiste en saber en qué fase se encuentra la organización para promover su evolución en base a una estrategia adecuada. En este sentido se nos plantean dos opciones: o situarse en un proceso de digitalización simple sin que la implementación de determinadas herramientas se alinee con el modelo de negocio o bien optar por la llamada ‘cultura de innovación’, entendida no como una fase, sino como una manera de hacer y de actuar de la propia organización. Para considerar que la transformación digital responde a un cambio global e integral, ha de existir la voluntad de lograr la excelencia en todos los ámbitos, lo que implica un cambio de mentalidad y de planteamientos internos. Áreas internas clave El cambio digital en las empresas turísticas se ha de centrar en la experiencia del cliente, los procesos y operaciones y los nuevos modelos de negocio. La experiencia del cliente (o Customer Experience) es relevante, tanto en la fase de inspiración como en el momento de la reserva o durante el viaje. Aportar valor en todas esas fases es el principal reto y son las nuevas tecnologías las que aportan al sector un mayor conocimiento de la demanda. En cuanto a los procesos y operaciones, es importante automatizarlos para propiciar una mayor flexibilidad a los trabajadores y disponer así de una mayor gestión del rendimiento. En este sentido, es clave contar con un propósito claro, visión y personas motivadas. Por último, respecto a los nuevos modelos de negocio, la integración de las tecnologías favorece la aparición de nuevos modelos más innovadores que implican una conversión digital de los procesos y nuevos negocios digitales. Colaboración de personal propio y externo Si nos centramos en el papel que juega el equipo humano de las empresas turísticas, hay que destacar que para que la transformación digital se implemente en todos los ámbitos, es básico que el conjunto de todo el personal forme parte de dicho proceso. Obviamente, en primer lugar, la implicación de la dirección es esencial y decisiva en la evolución de éste. No está de más recordar que digitalizar una organización se considera un trabajo complejo, dado que se trata de replantear y reorganizar los procesos, productos, servicios, clientes, modelos de negocio, talento, etc. Y aunque se pueda empezar por pequeños cambios, lo cierto es que en la mayoría de los casos se hace necesario contar con la colaboración de proveedores externos especializados, ya sean startups o emprendedores, para desarrollar el cambio digital. Son los llamados ‘modelos de innovación abierta’. Puedes descargar el informe “Digitalización en el sector turístico” en el siguiente ENLACE Compartir